viernes, 29 de enero de 2016

Programando al Experto



En el mundo actual de la computación, cada vez se necesitan más conocimientos y habilidades respecto a la programación. Es por eso que existe una gran variedad de libros que pueden servir de apoyo a la hora de aprender algún lenguaje de programación. No obstante, muchos de estos libros “ofrecen” o “prometen” la oportunidad de aprender cierto lenguaje en determinado tiempo (muchas veces se refieren a horas); pero, ¿realmente, es eso posible?

De manera personal, siento que los libros que pretenden volver al lector un experto en algún lenguaje de programación, en cuestión de horas, no son lo más eficiente; ya que, la mayoría de lo que se ve es teoría y no se abarca mucha práctica, cuando el aprender a programar, sea el lenguaje que sea, requiere de práctica para aprender de errores, fallas y éxitos, así como para entender el ambiente y sintaxis del lenguaje.

Apoyando la idea del autor, Peter Norvig, creo que 24, 21, etc. horas no son suficientes para dominar un lenguaje, ya que uno, nunca deja de aprender. Para ser un buen programador, sí, se tiene que leer, pero también se necesita mucha práctica, convivir con otros programadores para entender su lógica, sus ideas, sus códigos, para ver qué tan buenas o malas pueden resultar nuestras ideas y poder apoyarnos, ya sea en cuestión de dudas o simplemente para adquirir experiencia. Como dice el autor, para volverse experto en cualquier actividad, por ejemplo, deportes, uno necesita practicar y entrenar, pues la pura teoría no es suficiente para poder desarrollarse en esa área; lo mismo sucede con la programación, uno debe “ejercitarse” para poder ser un experto y si hay algún error o falla, siempre se puede volver a intentar.

No estoy diciendo que los libros de programación sean malos, simplemente apoyo la idea de que, para volverse un experto en el área de programación, no basta solo con la lectura, sino que hay que practicar y ser constante. Uno nunca deja de aprender, el ser humano siempre está en constante aprendizaje de sus ACCIONES, ya sea de errores o éxitos; es por eso, que digo que el volverse experto en algo no es cuestión de horas, pero sí de años.

REFERENCIAS:

·        Norvig, P. (n.d.) Teach Yourself Programming in Ten Years. Recuperado: Enero 29, 2016, de http://norvig.com/21-days.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario